For the first time in Mexico, Héctor Zamora is presenting a project taken from the new direction of investigation pursued by his work, which involves actions in the creation of his site-specific interventions. Such is the case of Order and Progress (2012-2016), The Abuse of History (2014) and Rupture (2016), works produced in Peru, France and Brazil that have evoked concepts of freedom, lack of satisfaction, oppression, progress and the symbols of progress. In Memorandum Zamora merges the special characteristics of the building with a mechanical activity, generally associated with the female gender, to set out diverse lines of interpretation of a sociological and political character related to the local and global context. Zamora critically refers to the functioning of the governmental, bureaucratic and institutional systems of power and points to the role of the secretary in the misogynist, capitalist workforce. The subjugation and invisibility of the female role are subverted by the artist in a type of homage-action that establishes the participants as the sole presence during the action, while they weave a self-referential narrative as they type their own biographies.
The artist acknowledges as references the theme of vulnerability in the face of the justice system explored in Franz Kafka’s novel The Trial, as well as The Swedish Theory of Love (2015), a documentary on an efficient and organized society that suffers from isolation and individualism. Another example is Natalia Almada’s film Everything Else (2016), which presents the indifference and dehumanization expressed towards government office workers, a portrait of survival marked by routine, alienation and solitude, inspired by Hannah Arendt’s idea of bureaucracy as one of the worst forms of violence.
The constructive, visual and sound elements of Memorandum make reference to assembly plants, factories and workshops. They reveal the disadvantages of forming the least-valued link in the chain of machinery, hence the word used for the title, which means ‘what must be remembered.’ Zamora provokes memory, in the institution, in this country, and as a witness to the present times.
Itzel Vargas Plata
Después de varios años, Héctor Zamora regresa a México con un proyecto en la línea de investigación de sus obras más recientes que involucran el elemento performático. Es el caso de Orden y Progreso (2012-2016), El Abuso de la historia (2014) y Ruptura (2016), donde sus evocaciones han girado alrededor de la libertad, la insatisfacción, la opresión, el progreso y sus símbolos. En Memorándum Zamora conjuga las características espaciales del edificio con una actividad mecánica, generalmente asociada al género femenino, para tender líneas diversas de interpretación de carácter sociológico y político relacionadas al contexto local y global.Zamora consigue señalar críticamente el funcionamiento de sistemas de poder gubernamental, burocrático e institucional y apunta hacia el rol de la mujer en la fuerza de trabajo misógino / capitalista. La subyugación e invisibilidad del papel femenino son revertidas en una suerte de acción homenaje, donde las participantes tejen una narrativa autorreferencial al mecanografiar sus propias biografías y se constituyen en la única presencia.
Esta temática también es pertinente con la historia de la madre del artista, quien trabajó como secretaria en las oficinas del ISSSTE durante 30 años y con su padre, quien hizo carrera política en el PRI y en la Federación Nacional de Trabajadores al Servicio del Estado, ambas instituciones públicas y con sedes vecinas al Museo del Chopo.
Otras aproximaciones al tema son la vulnerabilidad frente al sistema de justicia explorado en el libro El proceso de Franz Kafka y La teoría sueca del amor, documental de una sociedad eficiente y organizada víctima del aislamiento y el individualismo, así como la película de Natalia Almada, Todo lo demás, donde presenta la indiferencia y la deshumanización hacia los trabajadores de las dependencias gubernamentales. Este retrato de sobrevivencia marcado por la rutina, la alienación y la soledad, estuvo inspirado en la idea de Hannah Arendt sobre la burocracia como una de las peores formas de violencia. Los elementos constructivos, visuales y sonoros de Memorándum aluden a otras referencias como las maquilas, las fábricas y los talleres. Develan las desventajas de constituir el eslabón menos justipreciado de la maquinaria, de ahí el vocablo que titula esta propuesta, cuyo significado refiere “lo que debe recordarse”. Zamora incita a la memoria, dentro de la institución, en este país y como testigo de los tiempos actuales.