Lúcia Koch & Héctor Zamora
2006 – 2019,
“Ecomuro 8” clay brick modified with
9, 18 and 24 degrees sections,
Variable dimensions
Uma boa ordem, es el resultado de
la colaboración entre los artistas Lúcia
Koch y Héctor Zamora, presentada
por primera vez en 2006 durante la
edición 27 de la Bienal de Sao Paulo.
Fundación Casa Wabi agradece a los
artistas la generosa donación de la
pieza.
En esta re-configuración, la pieza es
adaptada al espacio de los jardines de
Casa Wabi. A pesar de ser un
desdoblamiento de esa primera pieza
de la Bienal, la relación con el espacio
la reinventa.
A través de 5 muros levantados con
bloques de construcción hechos de
barro y modificados en una variedad
de ángulos ( 9,18 y 24), se generan
paredes serpenteantes que se
integran a la flora que los rodea. Esta
intervención arquitectónica reta los
límites del espacio, oscila entre la
transparencia y la opacidad, entre lo
abierto y lo cerrado. Da la posibilidad
de recorrer y atravesar. Así mismo,
los muros operan como aparatos de
comunicación entre dos o mas
personas, ponen en contacto, cuando
parecerían apartar. Incita a ver el
paisaje desde una nueva perspectiva,
siguiendo patrones geométricos que
por momentos se traslapan,
generando marcos ovales que
encuadran el paisaje. Los muros en
Uma boa ordem filtran el amanecer
y la puesta del sol, acentuando las
capas que se superponen, dibujando
sombras y luces que se traslucen por
toda la instalación.
Koch y Zamora juegan con el
contraste generado entre los muros
de concreto de Casa Wabi con sus
líneas rectas e imponentes y los
muros independientes, autoportantes,
curveados donde circula el aire y la luz
y donde no existe una entrada o
salida específica. De este modo,
redefine el espacio y multiplica las
posibilidades de observación. Uma
boa ordem genera un ambiente
transitable y abierto donde la
estructura es tan importante como lo
que la rodea.
collaboration between artists Lúcia
Koch and Héctor Zamora. It was
presented for the first time in 2006
during the 27th edition of the Sao
Paolo Bienal. Casa Wabi Foundation
thanks the artists for their generous
donation.
In a re-configuration, the piece is
adapted to the gardens of Casa Wabi.
Despite being a revised version of the
original installation presented in the
Bienal, it is reinvented via the new
relationship with the space.
Through 5 walls erected with
construction blocks made from clay
and sectioned at a range of angles (9,
18 and 24°), new meandering walls
are generated and seamlessly
integrated with the surrounding flora.
This architectonic intervention
challenges the limits of space,
oscillates between the transparency
and opacity, between open and
closed. It creates a way through and
across. The walls operate as
communication apparatus between
observers, bringing them together
when they appear to be obstacles. It
prompts to view the landscape from
new vantage points, new
perspectives that follow geometric
patterns, at moments overlapping,
producing an oval framing for the
landscape. The walls in Uma boa
ordem filter the sunrise and sunset,
accentuating the layers of
superimposed shadows and light,
translucent throughout the
installation.
Koch and Zamora play with the
contrast between the concrete walls
from Casa Wabi, with its imposing
unbending lines and their own
independent walls, self-contained and
curved, where the air and light freely
circulate, without an entrance or an
exit. They redefine the space,
multiplying the possibilities of
observation. Uma boa ordem
generates an open and traversable
ambience, where the structure is as
important as the surroundings.
Special thanks to:
Ladrillera Mecanizada S.A. de C.V.
Nara Roesler
José Ramírez
Museo de Arte Contemporáneo de Monterrey,
MACO